Hace 199 años se libró la Batalla de las Queseras del Medio
 El 2 de abril de 1819, en el lugar denominado Las Queseras del Medio, en el estado Apure, José Antonio Páez, junto con 153 lanceros, logra derrotar a más de mil jinetes, pertenecientes a la caballería española.
Este encuentro se produce cuando El Libertador, Simón Bolívar, se repliega hacia la zona llamada los "Proteritos Marrereños", ubicado a la derecha del Río Arauca, lugar en el cual el jefe de las tropas realistas, Pablo Morillo, decide atacarlo, con la intención de neutralizar el avance patriota en territorio venezolano.
Los planes del jefe español es conocido por Páez y logra cruzar, sin ser visto, el Río Arauca, sorprendiendo al campamento español, quienes mueven a su caballería en contra de las filas de los independentistas.
Ante esta situación, José Antonio Páez decide retirarse en la dirección donde esperaba Simón Bolívar con una unidad de infantería, siendo perseguido por la cabellería española.
Una vez alejada la caballería española de su componente militar, Páez se da vuelta y da su famoso grito: "Vuelvan Caras", atacando por sorpresa a la fuerzas españolas, quienes sorprendida por la maniobra de los efectivos del ejército patriota decide retirarse precipitadamente, siendo derrotada.
Concluida la batalla, Bolívar felicita a Páez y a sus hombres a quienes dice: "Acaban de ejecutar la proeza más extraordinaria que pueda celebrar la historia militar de las naciones. Lo que hicieron no es más que un preludio. Contad con la victoria que llevan en las puntas de sus lanzas y de vuestra bayonetas".
Al finalizar la ceremonia de felicitación, Bolívar condecora a Páez y a sus hombres con la "Cruz de los Libertadores".
Vuelvan Caras
La maniobra "Vuelvan Caras", ejecutada por José Antonio Páez en Las Queseras del Medio, es en términos militares una táctica llevada a cabo por las unidades de caballería.
Esta consiste fundamentalmente en un cambio de dirección de la retaguardia, en la que los que se retiran vuelven cara a sus perseguidores, lo cual crea una gran confusión en los mismos. La maniobra, como tal, se ejecuta mediante voz de mando o toque de trompeta, siendo la última la más usual.
A esta estrategia también se le conoce como "volver cara al enemigo".
Grito inspirador
En el año 2004, durante el acto de instalación del primer taller de Alto Nivel Misión Vuelvan Caras, el Comandante Hugo Chávez, exhortó al pueblo a llenarse todos los días de vigor de fuerza de optimismo, de autocrítica, de espíritu correctivo, unitario, de muchas fuerzas que provienen solo del colectivo y de las profundidades de nuestra historia de nuestro espíritu, al referirse a la emblemática Batalla de Las Queseras del Medio.
"Nos hemos inspirado para tomar el grito de Vuelvan Caras, como consigna nacional, como llamado nacional, como eje moral, vital para esta Misión Vuelvan Caras, para este esfuerzo supremo que hemos comenzado a hacer, no es cualquier programa más, no es ningún plan de empleo más, es algo verdaderamente estratégico y vital como ya lo he dicho. Recordemos entonces, lo que ocurría por Venezuela, porque de allá viene todo este impulso, por estos días de 1819", dijo.
A estas palabras agregó: "Abril de 1819. Venezuela estaba todavía, el poder central en manos del imperio de España y por allá por las riveras del Orinoco y del Apure, andaba victoriosa la revolución que se había primero replegado, y luego fortalecido en aquellos espacios".
Durante su alocución, Chávez contó: "Se estaban dando una jornada muy importante en Apure. Bolívar se fue a conocer a Páez, no se conocían. Páez era el caudillo de los llanos y aprovecho para rendir tributo a José Antonio Páez, el tributo guerrero como libertador de Venezuela, lo que ocurrió después es otra historia, pero al Páez de Las Queseras hay que rendirle tributo".
Un Páez y cien mil llaneros
Siguió su intevención resaltando: “Al “Taita”, que supo recoger de las sabanas a los peones a los zambos, a los negros, como Pedro Camejo, a los hombres mejores que con él andaban, él supo interpretarlos y unificarlos, en aquél ejército que hizo expresar a Pablo Morillo ante el rey de España, años después, aquella frase: ‘Su Majestad, es que aquellos no son ningunos salvajes’. Cuando el rey de España, le reclamaba al General Pablo Morillo, de los mejores generales de la España imperial, el hecho de haber sido derrotado aquí, y haber llegado a España derrotado por los salvajes aquellos -decía el rey de España- o decían en España y Pablo Morillo le dijo al rey aquello: ‘Su majestad es que no son ningunos salvajes, usted me dá un Páez y cien mil llaneros del Apure y yo le pongo a todo Europa a sus pies su Majestad’.
El Comandante Chávez calificó a los lanceros de Páez como "guerreros indomables, invencibles".
"Con Páez andaba Francisco Farfán de los Farfanes de la Acosta Arauca. Indios como Pablo y Francisco Farfán, andaban con él hombres de los llanos del centro. Mujeres, era un ejército de hombres y de mujeres, no sólo de hombres, no se equivoque nadie, andaban los mujeres ahí también y batallaban las mujeres, contra los hombres y convencidos y decididos romper las cadenas aquellos de trescientos años de imperialismo, de yugo, de explotación y de coloniaje y allá fueron a conseguirse en el hato la Caña Fistola; José Antonio Páez y Simón Bolívar".
Prensa Digital MippCI/Agencias
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